Albóndigas de Pavo con Champiñones

Hacía bastante tiempo que no publicaba ninguna receta cuyo ingrediente principal fuera la carne. La verdad, es que en mi casa preferimos las verduritas. Pero hay que comer de todo y tanto la carne como el pescado son unas importantes fuentes de proteínas indispensables para gozar de una buena salud.
Y bien, como resultado de una ardua labor de investigación por mi parte, pero sobre todo por parte de mi madre, para localizar un tipo de carne y de pescado que me pueda gustar y que además no afecte negativamente a mis niveles de colesterol hemos dado con... las albóndigas de pavo. Al ser carne picada y además en forma de albóndigas resulta mucho más fácil de comer para quienes la carne no nos entusiasma en exceso y también para los más pequeños de la casa, que a veces les resulta complicado comerse un filete, y las albóndigas o los filetes rusos resultan unas buenas alternativas para ellos. Aparte, hay que añadir que el pavo es bajo en grasas, con lo que los niveles de colesterol no se suben por las nubes. La forma de hacerlas ha sido idea de mi madre y quedaron tan buenas que por eso he decidido compartirlas con todos vosotros. Un plato sencillo, para el día a día.



INGREDIENTES (para 3 personas)
  • Un envase de 12 unidades de albóndigas de pavo (360g)
  • media cebolla picada
  • dos tomates grandes rallados
  • un chorrito de brandy
  • una bandeja de champiñón laminado
  • un vaso de agua
  • una cucharadita de harina fina de maíz 
  • 2 hojas de laurel
  • aceite de oliva virgen extra
  • sal
  • pimienta blanca y negra molida
  • 6 huevos cocidos de codorniz





PREPARACIÓN
  1.  En primer lugar, cubrir el fondo de una sartén mediana con aceite de oliva virgen extra. Calentarlo y pochar media cebolla picada. Añadir un pelín de sal y dejar a fuego lento hasta que la cebolla esté bien blandita.
  2. Mientras, rallar dos tomates grandes y reservar.
  3. Cuando la cebolla esté bien pochada, sacarla a un bol y triturarla con la ayuda de una batidora eléctrica.
  4. Volverla a pasar a la sartén y añadir los tomates rallados. Freírlo todo junto.
  5. Con el sofrito hecho, añadir un chorrito de brandy y dejarlo hervir un par de minutos, hasta que evapore el alcohol.
  6. Añadir el champiñón laminado y rehogar.
  7. A continuación, pasar esta preparación a una cazuela. E incorporar el agua, dos hojitas de laurel, un poco más de sal y unas vueltas de pimienta. Y mezclar.
  8. Sacar dos dedos de este "caldo" a un vaso y diluir una cucharadita de harina de maíz. Verter la harina de maíz diluida en la cazuela y removerlo todo para que se mezclen los distintos ingredientes.
  9. Por último, incorporar las albóndigas de pavo y calentar a fuego fuerte hasta que rompa a hervir. Después, bajar el fuego y dejar a fuego medio-bajo durante unos 10 minutos.
  10. Antes  de servir, acompañar con unos huevos cocidos de codorniz cortados en cuartos. 

Comentarios

  1. No es mala idea convertir a la insípida pechuga de pavo en albóndiga. Así a pasado a ser algo sabroso y jugoso.
    Besos.
    JUEGO DE SABORES

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  2. Nunca las he probado de pavo, por ello, me quedo a tu mesa.

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  3. ADORO ALMONDEGAS MAS DE PERU NUNCA FIZ.
    O ASPECTO DESSAS ESTA UMA MARAVILHA, GOSTO MUITO DE COGUMELOS NO MOLHO.
    BJS

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  4. Muchas gracias por vuestros comentarios!!
    Me alegro mucho de que os hayan gustado estas albóndigas.
    Un abrazo!! =))

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  5. Ay con lo que me gustan las albóndigas!! Estas se ven de lo más apetecible.
    Y encima sanas, sanas!!
    Un beso.

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    Respuestas
    1. Sí, sanas y bien ricas.
      Muchas gracias por comentar!! =))
      Saludos!

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